La gente del centro de estudiantes de la facultad hacía una maratón, que en realidad no era una maratón sino los 100 metros noséqué.
El chico de rulos ganaba, pero me hacía trampa, lo sé. En la carrera de obstáculos había que pasar por laberintitos en los que mágicamente, justo los míos tenían la puerta cerrada con llave (y los de él no!!). Perdía, él ganaba.
Despues alguien empezaba la carrera antes y se empezaba de vuelta pero nadie era suspendido.
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