Es que no hay que rascarse,
pero te imaginás que te pica.
Todo está en tu mente.
Entonces imaginás que vienen muchos muchos mosquitos y los matás a todos con una de esas paletitas verde agua que tienen las abuelas para matar moscas.
Dejás todas las paredes manchadas
no con sangre de mosquito, nono, eso ni se ve,
la sangre es tuya.
Ellos tenían tu sangre.
Y nunca mueren todos porque cuando crees que se termina el verano y que "por suerte no hubo mosquitos" viene el otoño y zas, todos los potecitos de agua llenos de verdín con los que creías que "la mascota no se iba a intoxicar" se te vuelven en contra y criaron mosquitos bebé que vienen a atacarte y musicalizar tus noches.
1 comentario:
sueño de anoche: voy al oculista, y cuando llego a la consulta, la médica en cuestión resulta ser... Narda Lepes! que me diagnostica una leve intolerancia al color naranja, para lo cual me receta lentes de contacto marca Adidas, que se adhieren bien a la retina evitando se generen burbujas de aire en el medio (???)
Julia
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