No empieza acá pero pasa algo que no retuve, con una casa en un jardín y mucho verde.
Estamos en un edificio gigante, queremos golosinas pero no queremos bajar a comprarlas. Hay edificios gigantes alrededor del nuestro que son como stands de golosinas, especialmente diseñados para tentarte y que sea difícil no querer bajar a comprarlas, porque las querés más, porque las ves todo el tiempo y en tamaño descomunal. Dulces sabor uva o incluso una nueva golosina de Alf. Viene mi primita y me cuenta que ya bajó y se compró un mini-Alf de plástico. Los niños tienen mucha energía.
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